Imagina conseguir entradas para el festival de música más emocionante de todos los tiempos.
Habrá clima tropical, bandas increíbles, celebridades famosas, villas de lujo, comidas gourmet y momentos para subir a Instagram.
Ahora, imagne lo contrario.
Está varado en una isla, duerme en un colchón mojado, come pan duro, no tiene señal telefónica y solo puede escuchar el ruido de multitudes enojadas.
Ahh, y también hay tiburones.
A las personas que compraron entradas para el Festival Fyre se les prometió el primer escenario, pero de alguna manera terminaron en el segundo.
Netflix y Hulu han publicado un documental sobre que fue lo que sucedió.
Veamos algunas lecciones muy valiosas que puede aprender como organizador de festivales.
¿Qué fue el Fyre Festival?
El Fyre Festival, se promocionó como un «festival de música de lujo» y tuvo lugar en las Bahamas en abril y mayo de 2017.
El evento fue co-organizado por el famoso rapero Ja Rule y promocionado por modelos como Kendall Jenner y Bella Hadid.
¿Qué podría salir mal? Todo.
El organizador principal, Billy McFarland, logró arruinar cada aspecto del festival.
Esto incluía investigación, planificación, preparación, presupuesto, comunicación, mercadeo, restauración, alojamiento, seguridad, relaciones con los artistas y aspectos legales.
Fue la tormenta perfecta, y le valió a McFarland ocho juicios y seis años de prisión.
¿Qué pueden aprender los organizadores de este festival?
El lado positivo es que los organizadores de festivales pueden aprender mucho de los errores de McFarland y de la compañía.
Echemosle un vistazo.
Lección # 1: No mentir.
Por muy cliché que parezca, la honestidad es la mejor política en la vida.
La primera isla que McFarland logró asegurar para el festival resultó pertenecer a Pablo Escobar. El Fyre Festival se podía llevar a cabo allí bajo la estricta condición de que no se mencionara la conexión de Escobar.
McFarland decidió incumplir el contrato al utilizar esa conexión como una herramienta promocional. Incluso, luego de asegurar una segunda ubicación, consideró oportuno continuar con la mentira acerca de estar vinculado a Escobar.
El Fyre Festival, también afirmó trabajar con las Reales Fuerzas de Defensa de Bahamas, en materia de seguridad para el evento. Lo adivinaste, las Reales Fuerzas de Defensa de Bahamas, nunca oyeron hablar del Fyre Festival.
Lección: No mienta si quiere tener algo de credibilidad en la industria.
Lección # 2: Investigar los aspectos legales y no romper la ley.
Una cosa que los organizadores del Fyre Festival hicieron bien fue un influyente marketing en las redes sociales.
Se aseguraron el apoyo de influyentes y prominentes personas tales como Kendall Jenner, Bella Hadid y más de 400 personalidades de los medios.
Lo que no hicieron, fue revelar el hecho de que a estas influyentes personas se les pagó por su apoyo.
Eso los hizo navegar en agua caliente con la Comisión Federal de Comercio.
Lección: Investigue la ley de marketing y trate de no romperla.
Lección # 3: Hacer un presupuesto realista y no desperdiciar dinero
McFarland parece haber hecho cero investigaciones sobre los costos de organizar un festival.
Cuando se acercó a los inversionistas, le dijeron que el evento costaría entre $ 5 y 12 millones.
Él no les creyó.
McFarland estuvo cerca de obtener fondos de Comcast Ventures. Se retiraron cuando no el pudo probar que su compañía tenía un valor de $ 90 millones, tal como afirmaba.
Malgastó los 4 millones de dólares que obtuvo de un inversor de moda en oficinas de lujo en Tribeca, Manhattan.
McFarland finalmente logró obtener fondos de Ezra Birnbaum … pero los tuvo que devolver en 16 días, básicamente un préstamo de día de pago.
Lección: Investigue el costo y planifique su presupuesto en consecuencia.
Lección # 4: escuchar a las personas con más experiencia que uno.
Un mes antes del festival, McFarland contrató al veterano productor de eventos Yaron Lavi.
Lavi, veterano productor de eventos y todo, le dijo a McFarland que posponga el festival de abril a noviembre para evitar un desastre.
McFarland derribó la idea de Lavi porque el clima sería mejor en abril.
Lavi luego sugirió que, dado el corto período de tiempo, las carpas serían un alojamiento más realista que las villas de lujo.
McFarland, luego, tuvo la idea de que el festival debería ser sin efectivo y sin tarjetas. En su lugar, quería que los asistentes depositaran hasta $ 1,500 en una «Banda Fyre» por adelantado.
¿El problema? La banda necesitaba una conexión Wi-Fi para funcionar … y no habría Wi-Fi en el sitio del festival.
Lección: Escuche a personas más experimentadas y tome sus consejos.
Lección # 5: Comunicar bien y manejar las expectativas.
En este punto, el Fyre Festival había perdido su alojamiento, compañía de catering, servicios médicos, acceso a la comunicación y varios actos musicales.
Lavi, siempre la voz de la razón, aconsejó a McFarland comunicar estos cambios a los invitados.
McFarland dijo que los enviaría por correo electrónico … y luego no lo hizo.
A mediados de marzo, otros miembros del personal comenzaron a airear la posibilidad de que tal vez posponer el festival sería una buena idea.
¿La respuesta? «Solo hagámoslo y seamos leyendas, hombre».
Lección: Comunique cualquier cambio y gestione las expectativas de las personas.
Lección # 6: Asegurar que todas las instalaciones y el personal estén en su lugar
El primer día del Fyre Festival finalmente llegó, y ahí es donde comenzó el verdadero caos.
Las tiendas de campaña y los colchones de socorro (también conocidos como “alojamiento”) se empaparon debido a las fuertes lluvias de la noche anterior.
Mientras buscaban la solución, os organizadores llevaron a cabo una espontánea fiesta en la playa para los recién llegados.
No encontraron una solución.
En su lugar, hicieron que los asistentes al festival hicieran fila para inscribirse en una tienda de campaña. Después de varias horas, los invitados perdieron la paciencia y reclamaron la primera y la mejor tienda para sí mismos.
Los que reclamaron una tienda fueron los afortunados. Otros terminaron sin alojamiento.
Además de eso, tendrían poca comida, cero recepción telefónica o Wi-Fi, sin baños portátiles, sin agua corriente, tiburones en el agua y sin personal médico disponible.
Pero hay más.
El gobierno local decidió impedir que los aviones aterrizaran en la isla, dejando a todos varados.
Lección: Asegúrese de que todas las instalaciones y el personal estén en su lugar.
Lección # 7: Reconocer los errores
«… esto NO ES MI CULPA» – Ja Rule
Todos, eventualmente, se subieron a un avión hacia casa luego de que el gobierno levantara la prohibición de aterrizaje.
Lo que no recibieron fue una verdadera disculpa de los organizadores del festival. Ni Ja Rule ni McFarland parecían haber reconocido sus errores.
La mayoría de las personas influyentes de las redes sociales involucradas en el desastre (aparte de Hadid y algunos otros) tampoco se han disculpado por su participación.
Sin embargo, el Ministerio de Turismo de Bahamas se disculpó en nombre de las Bahamas.
Lección: Siempre hágase responsable en sus errores.
Lección # 8: Investigar a las personas antes de trabajar con ellos.
Todos los involucrados en el Fyre Festival podrían haber esquivado una bala si hubieran investigado un poco.
No fue por primera vez que McFarland delinquió en cuanto a esquemas fallidos como este.
Tan solo cinco minutos de Google habrían revelado un patrón de estafas y engaños.
Lección: Investigue personas antes de trabajar con ellos, y busque banderas rojas.
Conclusión.
Tendrías que realmente hacer un gran esfuerzo para crear un desastre como el Fyre Festival.
Sin embargo, vale la pena reiterar algunas de las lecciones que podemos extraer de las Aventuras de Billy McFarlane.
- Consultar costos y aspectos legales.
- Planificar un presupuesto razonable.
- No mentirle a la gente.
- Escuchar a los expertos (especialmente si los contrató).
- Comunicar cualquier cambio al planes.
- Investigar a las personas antes de trabajar para o con ellos.
- Asumir los errores (porque no puede huir de ellos).
Buena suerte con su festival… y no lo organice cerca de tiburones.